04 Sep Una llave maestra que cualquiera puede fabricar en casa
Una de las características inherentes al avance tecnológico es dejar obsoletos los sistemas anteriores, y el próximo gremio que podría cocharse contra el tren del futuro es el de los cerrajeros. Los ingenieros Christian Holler y Jos Weyers presentaron ayer una llave, confeccionada con una impresora 3D, que puede abrir casi cualquier cerradura. Ni siquiera necesita basarse en la llave original, basta con una foto de la cerradura en cuestión.
“No necesito casi nada para fabricar una llave. Básicamente, si puedo ver tu cerradura, puedo confeccionar algo que la abra”, explica uno de sus diseñadores. Y lo mejor es que no se necesita una impresora de alta definición, tan solo el software desarrollado por Holler y Weyers, capaz de recrear la llave desde una fotografía, con una información adicional sobre la posición de los pines que puede ser encontrada en cualquier software de moldeado de llaves. En caso de no disponer de una impresora 3D, se pueden enviar los planos a una empresa de impresiones por encargo y recibirla en casa a los pocos días.
Los autores de este software aseguran que pueden abrir prácticamente cualquier cerradura, y ésta es precisamente su gran cualidad. En realidad ya se pueden duplicar llaves con una impresora 3D, siempre copiando el original, pero no son efectivas a la hora de enfrentarse a cerraduras de seguridad, que suelen tener partes móviles. Las llaves generadas con el software Photobump pueden abrir cualquier cerrojo, ya que no copian a la auténtica, sino que se basan en las técnica del bumping.
Esta técnica se utiliza para abrir cerraduras sin forzarlas. Para ello se emplea una llave que se asemeja a una llave común pero que está diseñada con los dientes en su posición más baja, de forma que entren en cualquier cerradura. A partir de ahí, se utiliza el mismo truco que empleamos al jugar al billar: se golpea la llave suavemente y en una dirección determinada, de forma que la fuerza del golpe se transmite a los pistones con los que está en contacto y de ahí a los contrapistones que están encima. Estos saltan solo unos milimetros. Con habilidad, es posible hacer girar la cerradura justo en ese instante, abriendo la puerta sin causar ningún daño.
Este tipo de llaves existen desde hace décadas, pero su creación y distribución está controlada para evitar los problemas obvios. Con la llegada de las impresoras 3D esas restricciones desaparecen y aparece el riesgo de que cualquiera pueda crear las herramientas para emplear esta técnica.
No es para robar
Los ingenieros quieren dejar claro que su hallazgo no está orientado a fomentar la delincuencia ni el espionaje. De hecho, se niegan a distribuir el programa, que siempre se concibió con fines educativos. “El cielo no se está desmoronando, pero el mundo cambia y ahora la gente puede hacer herramientas”, comenta Weyers a Wired. “Ahora los fabricantes de cerraduras saben cómo hacer una a prueba del bumping“.
Algunos fabricantes, sin embargo, aseguran que la situación no es de momento alarmante en lo que se refiere al uso de este tipo de técnicas para forzar cerraduras de seguridad. “Vemos esto como un ejercicio interesante, pero no es particularmente representativo de lo que ocurre en el mundo real cuando un ladrón quiere entrar en una casa. Es cierto que puedes abrir algunas puertas, algunas veces, con llaves bumping, incluso si están hechas de plástico, pero su uso depende de tantas variables que no son especialmente eficaces”, asegura Joachim Gillert, directivo de la compañía Assa Abloy, compañía especializada en sistemas de cierre de seguridad.
Fuente: El Confidencial